Nombre maya: HO
PODER CREATIVO: Conferir poder
ACCIÓN: Comandar
FUNCIÓN: Esplendor
CUESTIONES A TRASCENDER: ¿Cómo asumo mi autoridad natural o trabajo mi autoestima?
MOMENTO EVOLUTIVO: Es el momento en el que nos cuestionamos CUÁLES son los RECURSOS que debemos conseguir.
El Tono Entonado señala el centro desde el cual se observa un propósito, Es el punto central entre los primeros 6 escalones y los próximos 6. En consonancia con el valor numerológico del Cinco, es la manifestación y aceptación de lo humano en uno mismo, el momento en el cual el humano se reconoce como tal, dándole valor a su propia importancia. El portador del Tono Entonado, desde el centro de todo, puede observar con visión privilegiada la
realidad externa e interna. Si el universo es infinito, un círculo o una esfera sin fin, entonces su centro puede estar en cualquier punto, y cada humano puede reclamar con derecho su condición de Centro del Universo, posición desde la cual puede empezar a entender y construir su existencia, su misión, su mundo. El portador del Tono Entonado descubre entonces su sabiduría interna, su condición íntimamente sagrada, y así va expandiendo su ser.
Tienen el don natural del mando, porque saben cómo se hacen las cosas. Suelen ser líderes o jefes natos, a los que uno obedecería fácilmente, no por imposición sino por su energía magnética, por su capacidad para influenciar desde su acción y su necesidad de compartir su luz.
Deberán trabajar su autoestima en la medida adecuada, saberse poderosos y con autoridad innata, son las claves para su accionar y para ser el centro de la acción de los demás, si no son conscientes o no se hacen cargo de su poder pueden vivir desde la sombra, siendo tal vez sometidos, o vivir siguiendo a los demás en vez de
marcar ellos su propia impronta. Deben cuestionarse también cuál es su base, cuales son sus cimientos, sus raíces. Cuál es su propósito central y manifestar siempre su visión individual, siempre observarse como centro de su propio universo. Al liberarse de lo que piensan que son dan lugar a ser lo que verdaderamente son.
Son personas que viven desde la simpleza, sin demasiadas vueltas ni complejidades, siempre y cuando vibren desde su centro.
Deben aceptar su “ser humano” pero no negar del todo su lado espiritual, aprender a centrarse entre la materia y la energía.
En toda escalera o camino energético (una propuesta colectiva de trece vibraciones) este Tono corresponde al “Yo Soy” y “Yo Puedo”