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50. TING / EL CALDERO

    “El caldero. Suprema fortuna. Éxito”.

    Mientras que “el Pozo” trata de los fundamentos sociales de la comunidad humana, que es como el agua que sirve de alimento al bosque, aquí se muestra la superestructura cultural de la sociedad. Aquí es el bosque que sirve como alimento a la llama, al principio espiritual. Todo lo visible debe proseguir su evolución y pasar a lo invisible. Así recibe su consagración y la claridad legítimas y arraiga sólidamente en el conjunto del universo.
    Aquí se muestra la cultura que culmina en la religión. El caldero sirve a los sacrificios divinos. Lo más elevado en el orden terrestre debe ser ofrecido a la divinidad. Pero lo que es verdaderamente divino no se manifiesta por separado de lo humano. La manifestación suprema de dios se encuentra en los profetas y los santos. Honrarlos es la verdadera manera de honrar a Dios. La voluntad de Dios que se revela a través de ellos debe ser acogida con humildad; se produce entonces una iluminación interior y una inteligencia verdadera del universo que conducen a una gran fortuna y un gran éxito.