Uri Geller es una de las figuras más conocidas en el ámbito de la parapsicología y el entretenimiento psíquico. Nacido en Tel Aviv en 1946, Geller saltó a la fama en la década de 1970 con sus aparentes habilidades para doblar cucharas, detener relojes y leer la mente, afirmando poseer poderes de telequinesis y percepción extrasensorial (ESP). Aunque ha sido objeto de gran atención mediática y científica, su carrera ha estado marcada tanto por la admiración como por la controversia, ya que muchos lo consideran un ilusionista más que un verdadero psíquico.
Ascenso a la Fama
Uri Geller ganó popularidad en la televisión británica y estadounidense, donde demostraba su capacidad de doblar objetos metálicos, generalmente cucharas, con lo que parecía ser solo el poder de su mente. Su carisma y su seguridad atrajeron a audiencias masivas, que quedaron fascinadas con sus demostraciones. Geller también afirmaba ser capaz de hacer que los relojes se detuvieran o comenzaran a funcionar nuevamente mediante la concentración.
En 1973, apareció en el programa de entrevistas estadounidense de Johnny Carson, quien, siendo un mago aficionado, tomó precauciones para evitar cualquier tipo de truco de ilusionismo. Durante el programa, Geller no logró demostrar sus habilidades, lo que llevó a muchos escépticos a dudar de la autenticidad de sus poderes.
Investigaciones Científicas
Uno de los puntos más interesantes de la carrera de Geller es que fue objeto de investigación científica en varias ocasiones. En 1973, fue evaluado en el Instituto de Investigación de Stanford (SRI) por los físicos Russell Targ y Harold Puthoff, quienes realizaban estudios sobre la percepción extrasensorial y la telequinesis. Según los informes de Targ y Puthoff, Geller fue capaz de realizar hazañas inexplicables bajo condiciones controladas, como identificar correctamente dibujos ocultos en sobres.
Sin embargo, otros investigadores, como el ilusionista y escéptico James Randi, argumentaron que los experimentos no eran lo suficientemente rigurosos y que Geller utilizaba trucos de ilusionismo comunes. Randi, quien se convirtió en uno de los principales críticos de Geller, lo acusó de fraude en repetidas ocasiones y escribió el libro The Truth About Uri Geller en 1982, en el que detallaba cómo Geller podría haber llevado a cabo sus actos utilizando métodos tradicionales de ilusionismo .
Demanda contra Randi
En 1991, Geller demandó a Randi por difamación debido a sus continuas acusaciones de fraude. Aunque el caso fue desestimado, la disputa entre Geller y Randi puso de relieve el debate más amplio entre los defensores de la parapsicología y los escépticos. Mientras que algunos investigadores seguían creyendo que Geller tenía poderes genuinos, otros lo consideraban un ilusionista talentoso que había capitalizado la creencia pública en lo paranormal.
Actividades Posteriores
A pesar de las controversias, Uri Geller ha continuado manteniéndose en el ojo público. Durante las décadas de 1980 y 1990, colaboró con diversas agencias de inteligencia, como la CIA, en experimentos relacionados con la percepción extrasensorial. Los documentos desclasificados han revelado que Geller participó en pruebas de visión remota, aunque los resultados no fueron concluyentes. En años más recientes, Geller ha seguido haciendo apariciones en televisión, tanto en programas de entretenimiento como en documentales que exploran sus habilidades.
Uri Geller: ¿Psíquico o Ilusionista?
El debate sobre si Geller posee habilidades paranormales auténticas o si es un ilusionista sigue siendo un tema central en su carrera. Mientras que Geller siempre ha mantenido que sus habilidades son reales, escépticos como James Randi y otros lo consideran un maestro del ilusionismo que ha sabido aprovechar el fervor por lo paranormal.
Legado y Contribuciones
Independientemente de la controversia que rodea a su figura, Uri Geller ha dejado una marca indeleble en el mundo de la parapsicología y el entretenimiento. Su impacto en la cultura popular es innegable, y su figura ha servido como catalizador para la discusión en torno a la percepción extrasensorial y la telequinesis. La pregunta sobre si sus habilidades son reales o no sigue siendo un misterio para muchos, y su nombre está profundamente ligado al debate sobre los límites de la mente humana y el potencial psíquico.
En resumen, Uri Geller es un personaje polarizador que ha desafiado tanto a los creyentes como a los escépticos durante más de cinco décadas. Su legado, lleno de admiración y controversia, sigue siendo un símbolo de la fascinación humana por lo paranormal.