El Trígono es un Aspecto que se forma cuando dos Planetas están separados por un ángulo de ciento veinte grados. Este Aspecto se relaciona con los Signos de fuego y aire, que son los que se encuentran en esa relación angular desde Aries. El Trígono es considerado un Aspecto fluido, que permite una interacción armoniosa entre las funciones de los Planetas implicados. La energía fluye de manera natural, sin esfuerzo, y esto facilita la expresión de las cualidades planetarias.
A diferencia de la Cuadratura, el Trígono no suele generar crisis ni tensiones. Más bien, crea un espacio de facilidad y talento, donde las funciones de los Planetas se complementan y apoyan mutuamente. Sin embargo, precisamente por esta fluidez, puede haber una tendencia a la complacencia o a no aprovechar completamente las oportunidades de crecimiento que ofrece.
El aprendizaje que surge de los Trígonos está relacionado con el desarrollo de talentos naturales y la capacidad de disfrutar de las cualidades planetarias sin grandes esfuerzos. Aunque no implica necesariamente un desafío directo, este Aspecto permite profundizar en las capacidades personales y alcanzar niveles más elevados de expresión creativa.
El trigono tiene la fuerza y la fluidez de un río que baja por la montaña; no encuentra obstáculos en su camino hacia el mar ni se detiene aunque las piedras en el trayecto hacia abajo sean grandes. La fuerza del agua que cae es energía que se puede aprovechar.