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TONO RESONANTE (Siete) 7

    Nombre maya: UUK
    PODER CREATIVO: Canalizar
    ACCIÓN: Inspirar
    FUNCIÓN: Armonización
    CUESTIONES A TRASCENDER: ¿Cómo me relaciono con los demás? ¿Cómo puedo armonizar mi servicio?
    MOMENTO EVOLUTIVO: Es el momento en el que nos cuestionamos CÓMO percibo lo que sucede a mi alrededor?

    El Tono Resonante habla de la apertura mística, la canalización de lo sagrado, la conexión con lo superior. El número 7 resuena en símbolos y pautas energéticas como los chakras corporales, los planetas principales de la Astrología, la mística Estrella de Siete Puntas, los 7 colores del Arco Iris, los 7 días de la semana, los 7
    mares o cualquier otra serie simbólica de 7 asociada a niveles de conciencia. Esta vibración moviliza al portador del Tono Resonante a descifrar misterios profundos y desarrollar (conscientemente o no) su natural conexión con la Fuente Divina. El portador del Tono Resonante debe descubrir el poder que se activa a través de sus
    siete chakras o puntos energéticos, debe trabajar para que su energía fluya y no permanezca bloqueada, la fuerza lumínica que pasa por su espina dorsal, de manera tal que pueda transformar su visión material en una conciencia espiritual o más sutil, y todo logrado a partir de su auto-aceptación, el reconocimiento incondicional de su condición sagrada. El séptimo es el Tono central en el proceso de toda escalera energética, el escalón desde donde resuenan los punto medio para abrirse místicamente y tener la percepción de todos los escalones. Los portadores del Tono Resonante vienen a trabajar la relación con los demás, a aprender del eco de todo lo que resuena en su conexión armónica con el entorno. De esa manera, “en mitad del río”, deciden continuar andando hacia el final, hacia la otra orilla, en busca de la trascendencia.
    Son quienes tienen conexión directa con el universo, pueden percibir, sentir y captar señales, siempre que acepten su condición de canalizadores y no la nieguen o rechacen. El desafió será no depender de la confirmación de nadie. Liberarse de la necesidad del reconocimiento de sus talentos.

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