Nombre maya: UAK
PODER CREATIVO: Equilibrar
ACCIÓN: Comandar
FUNCIÓN: Igualdad
CUESTIONES A TRASCENDER: ¿Cómo puedo equilibrarme? ¿Cómo me organizo según mi ritmo interno?
MOMENTO EVOLUTIVO: Es el momento en el que nos cuestionamos cómo integramos el propósito con los desafíos.
El Tono Rítmico habla de equilibrio (no el estático, sino el dinámico de la oscilación de la balanza), la igualdad intrínseca de todo, la responsabilidad que nace de ser humanos. Un punto de partida que se va bifurcando en distintas direcciones. El portador del Tono Rítmico siente que debe trabajar y ponerse en movimiento
en busca de un equilibrio entre su persona, centro de todas las cosas, y la unidad de lo divino en lo más esencial de su ser. Es un movimiento rítmico y armónico que va de lo más profundo hacia la realidad cotidiana, donde se conjuga naturalmente lo divino con lo humano, donde se hacen las elecciones más sabias, donde se viven
con amor e iluminación superior los ritmos de la existencia. Se conoce a este Tono Rítmico como el equilibrio orgánico, que se entiende como una tendencia natural de todo lo que tiene vida para lograr la evolución de una etapa del ser a la siguiente.
Los que poseen el Tono Rítmico se muestran como autosuficientes, autónomos, porque siguen su ritmo interno, una música propia, que invita a los demás a ser respetada como tal, y que eventualmente se dejará mezclar con otros ritmos, sin perder el propio. Van así buscando y realizando su propio equilibrio personal, para su beneficio y el de los que saben escucharlos.
Son personas que tienen muy clara su identidad, sus raíces bien afirmadas, afianzando así su habilidad para responder desde su integridad, expresando y manifestando su esencia. Son quienes pueden fluir perfectamente con la energía de dar y de recibir.