“Después de la terminación. Éxito en asuntos pequeños. La perseverancia es ventajosa. Al comienzo fortuna, al final disturbios.”
La transición de la vieja época a la nueva ya se ha completado. En principio, todo está ya puesto en orden y es solamente en los detalles que él éxito todavía no se ha logrado. Todas las cosas están encaminadas y marchan por ellas mismas. Eso conduce fácilmente a relajarse y a dejar que las cosas sigan su camino sin preocuparse por ellas en detalle. Esta negligencia es la raíz de todos los males. Ella provoca necesariamente la aparición de los síntomas de decadencia. Aquí se tiene la regla que rige el curso habitual de la historia. Pero quien la comprende puede evitar los efectos gracias a una perseverancia y a una prudencia infalibles.